Ir al contenido principal

A 100 días del apocalipsis maya


El camino hacia el cumplimiento de la supuesta profecía maya del fin del mundo emprende su último tramo. A solo tres meses del anunciado 21 de diciembre de 2012, fecha en la que, según dicen, la Humanidad se lo jugará todo, ya sea una extinción en sentido literal o una reconversión espiritual,  se podría acelerar el curso de los acontecimientos. El aumento de los comportamientos sectarios o de determinadas especulaciones inmobiliarias –búnqueres subterráneos- serán algunos signos de eso que algunos se han empeñado en llamar “el fin del mundo”.


El “pelotazo” del 2012
Ya nos hemos hecho eco en este medio del negocio que está siendo para algunos promotores inmobiliarios el “boom” del 2012. No tenemos más que echar un vistazo al extraordinario fenómeno que está experimentando Bugarach, una pequeña villa al sur de Francia, ubicada a los pies de la montaña mágica del mismo nombre. Un pueblo en el que no hay censadas más de 200 personas pero que en los últimos años está siendo asediado por la llegada de miles de entusiastas de lo esotérico, de los movimientos de la Nueva Era y de los que, en definitiva, piensan que algo prodigioso va a ocurrir a finales de este año.
Refugio subterráneo

Bugarach se ha convertido en el lugar que sobrevivirá a la catástrofe planetaria. Esta idea ha provocado una situación insostenible en la villa; a tal punto, que está despertando la preocupación de las autoridades, que ya esperan que se multiplique la peregrinación en los meses que quedan. Los comerciantes están encantados, claro, y esta revitalización de la economía local se puede observar en el aumento exponencial del precio del metro cuadrado del suelo.
Si uno tenía pensado ir a Bugarach en las próximas semanas, quizás ya le resulte complicado alquilar un piso.
Este “pelotazo” inmobiliario también se ha dejado ver en un sector que ya parecía dormir el sueño de los justos: el de los búnkeres subterráneos. Sobrevivir bajo tierra parecía algo más propio de los años de la Guerra Fría, cuando se temía que un conflicto nuclear a gran escala se desatara en cualquier momento. De aquella época son buena parte de las instalaciones que pueden observarse en Estados Unidos y Europa. Hoy, la idea ha resucitado gracias al trabajo de ingenieros como Antonio Alcahud, uno de los mayores expertos en España en la construcción de búnkeres subterráneos. Según sus estimaciones, la demanda ha aumentado un 20%. El propio ingeniero considera que “la predicción maya, junto a las posibles catástrofes climáticas y el cambio de polaridad de la Tierra han reactivado este interés”.
En Estados Unidos, donde todo se hace a lo grande, cuentan desde hace dos años con un proyecto llamado VIVOS. Se trata de una serie de búnkeres subterráneos ubicados en lugares estratégicos, situados a diez metros bajo tierra. El complejo mide seis kilómetros cuadrados y dispone de todas las comodidades posibles para que ni siquiera eches de menos ir al cine o al gimnasio. El proyecto aspira a seleccionar a 4.000 candidatos, previo pago de 50.000 dólares, que serán los elegidos que verán un nuevo mundo después del próximo 21 de diciembre. En su web ya advierten de que disponen de plazas limitadas en sus emplazamientos en Nebraska, Indiana y Montañas Rocosas, dando a entender la demanda y supuesto éxito que está teniendo su programa.
Otro ejemplo es el de la empresa 20th Century Castle, que asegura que ha vendido 50 búnkeres y antiguos silos de misiles subterráneos en Estado Unidos.
En las próximas semanas cabe esperar que aumente este tipo de demandas.
Uno de los riesgos asociados a estos proyectos es que suelen congregar a gente a su alrededor que tiende al aislamiento y, por tanto, a distorsionar su visión de la realidad. En muchas ocasiones, pueden ser víctimas de peligrosas derivas sectarias.

Peligro sectario
El discurso de la salvación es el anzuelo que necesitan los gurús del fin del mundo para conseguir adeptos a la causa. Este discurso se podría radicalizar en las próximas semanas, dando lugar a actuaciones que pueden ser incluso peligrosas.
El fin del mundo que nunca llegó

Lo que podría ocurrir lo podemos sospechar gracias al un ejemplo reciente que nos lleva al supuesto profeta Harold Camping, de 90 años de edad. Camping recitaba sus palabras apocalípticas a través de la emisora Radio Family, en California. Así, anunció el fin del mundo para el 21 de mayo de 2011.
En las semanas previas, sus seguidores fueron presas de una fiebre que les llevó a malvender sus casas y coches. Algunos abandonaron sus puestos de trabajo y a sus familias. Robert Fitzpatrick desembolsó nada menos que 140.000 dólares, los ahorros de toda una vida, en la elaboración de 1.000 pancartas, que distribuyó por Nueva York, en las que se podía leer: “Terremoto Mundial. El más grande de todos, el 21 de mayo de 2011”. Me pregunto qué habrá sido de esta gente después del chasco.
Hasta aquí todo podría resultar relativamente anecdótico. La vertiente más peligrosa podemos encontrarla en que algunas mentes frágiles o desequilibradas puedan cometer alguna atrocidad. Días antes del 21 de mayo de 2011, en Palmdale, California, Lynn Bendetto, cortó el cuello de sus dos hijos, de 11 y 14 años de edad, y se lesionó a sí misma, temiendo la llegada del Apocalipsis. Afortunadamente, en este caso, los tres sobrevivieron.

¿Y después?
¿Qué pasará cuando la mañana del 21 de diciembre nos levantemos y nada haya ocurrido? ¿Exigiremos responsabilidades a todos esos gurús, sectarios, escritores, realizadores de documentales…que nos pusieron al tanto del peligro que corría al Humanidad? Sencillamente, se irán de rositas con el pretexto de que la creencia es libre.
Parte de los integrantes de los movimientos que esperaban un fin del mundo, transformación de las conciencias, o lo que sea, se sentirán frustrados y otro tanto tragará con el discurso de que realmente ha ocurrido una transformación interior. Cuando se hace una profecía y ésta no se cumple, el gurú suele cambiar la teoría, por ejemplo, aplazar la fecha.
Harold Camping, cuando metió la pata con su predicción, anunció una nueva fecha para octubre de 2011, ya que en mayo lo que había ocurrido es que se había abierto el periodo de la “Gran Tribulación”. Ya entrado este año, admitió su error públicamente, argumentando que “solo Dios conoce la fecha del fin de mundo”.
En el tiempo que quede hasta el 21 de diciembre cabe esperar que las autoridades aumenten el nivel de vigilancia a determinados grupos con creencias milenaristas, dirigidos  por un líder carismático con un discurso radical, y que tiendan al aislamiento.
Pero sobre todo, sería conveniente potenciar nuestro sentido crítico para evitar ser presas del miedo. Las teorías sobre el 2012 tienen tanto éxito porque se instalan en nuestra parte más emocional. Y cabe recordar que nuestro temor al fin del mundo no deja de ser una expresión del miedo a la muerte; algo a lo que nadie es ajeno.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Encuentros en La Cuarta Fase

"Soy la actriz Milla Jovovich , interpreto a la doctora Abigail Tyler . Este filme es una dramatización de eventos ocurridos en octubre de 2000. Cada escena está apoyada en imágenes de archivo. Parte de lo que verán es extremadamente perturbador" . Con estas palabras daba comienzo La Cuarta Fase ( Olatunde Osunsanmi , 2009) La propia Jovovich daba carta de veracidad a los hechos que se iban a reproducir delante del espectador en la siguiente hora y media; una maniobra muy arriesgada por parte de la actriz de origen ucraniano, como ahora veremos. La Cuarta Fase recrea los sucesos que presuntamente tuvieron lugar en el pueblo de Nome, Alaska, en el año 2000. A modo de documental se narra como algunos vecinos habían sufrido inquietantes experiencias nocturnas en las que sentían la presencia de un ser no humano en su propia habitación, algo que inevitablemente terminará experimentando la propia doctora Abbey Tyler. Durante las sesiones de hipnosis a las que la psicóloga somete a

Hugo Chávez, ¿víctima de los reptilianos?

 “Nosotros no tenemos ninguna duda en este punto. Los enemigos históricos de nuestra patria buscaron el punto para dañar la salud de nuestro comandante. De momento, ya tenemos bastantes pistas sobre este tema y tendrá que ser investigado por una comisión especial a nivel científico. Ha habido otros casos en la Historia, demasiados casos, como el de Yaser Arafat”. Eran las recientes palabras del actual presidente al cargo de Venezuela, Nicolás Maduro, para referirse a una posible complot en la muerte de Hugo Chávez. El responsable político no hacía sino aumentar las tesis conspirativas que ya venían circulando en torno a la figura de Chávez, desde que enfermara de cáncer hace dos años.

7 casas encantadas en Canarias

Se trate o no de lugares realmente encantados, lo cierto es que los inmuebles que hemos seleccionado a continuación arrastran una carga importante de leyendas. Son historias que con el paso de los años he ido recogiendo, en muchas ocasiones junto a mi compañero de fatigas, el periodista Héctor Fajardo, gran especialista en este tipo de experiencias. De la mano del lector queda el valorar la veracidad de estos relatos, aunque mi criterio personal es el de pensar que generalmente detrás de una leyenda siempre hay un poso de verdad.

Los fantasmas del accidente de Los Rodeos

Se cumplen 36 años del mayor accidente aéreo de la historia y aún resuenan con fuerza los ecos de la tragedia. El 27 de marzo de 1977, tuvo lugar un encadenamiento de nefastas circunstancias que hicieron irremediable la tragedia. Ese día, el aeropuerto de Los Rodeos, en el norte de Tenerife, se vio desbordado por la cantidad de aviones que llegaban desde el aeropuerto de Gando,  en Gran Canaria, debido a un artefacto explosivo que había estallado en el interior de sus instalaciones. La situación de caos vivida en Tenerife, sumada a la densa niebla y a una acción precipitada de despegue por parte de un avión de la compañía holandesa KLM, fueron algunos de los ingredientes del desastre. El balance no pudo ser peor: 583 muertos entre los dos aviones que colisionaron.

Claves sobre Prometheus. El origen dirigido de la vida

La última película de Ridley Scott, más allá de su prodigioso despliegue visual o sus erráticos giros de guión, plantea una serie de cuestiones trascendentales que tienen que ver con la vida, la muerte o si estamos solos en el universo. En la capacidad visual y narrativa de poner estos asuntos sobre el tapete es donde reside quizás una de sus mayores virtudes. Scott logra trasladar estos elementos directamente a la fibra sensible del espectador y éste no puede evitar plantearse si realmente la humanidad podría haber sido la creación de unos dioses-extraterrestres. El debate no hace sino abrirse cuando aparecen los créditos finales de la película, tal y como pueden dar cuenta los foros en Internet que bullen con innumerables preguntas sin respuesta. Como acertadamente me decía un amigo, lo mejor de la película ocurre cuando sales de la sala del cine.